El día de ayer, un hombre de 50 años fue víctima de un secuestro y robo con intimidación en La Serena, lo que tras la investigación de la PDI se logró detener a dos de los autores del delito.
Según los antecedentes recabados la víctima, que se trasladaba en su vehículo, fue abordada por una mujer, quien procedió a subirse al automóvil junto a otros tres sujetos.
Luego de unos minutos, estas personas lo intimidaron y obligaron a sacar dinero desde un cajero automático, para luego retenerlo en el vehículo por cerca de cuatro horas.
El Subprefecto Rodrigo Villarroel señaló que “la víctima fue obligada a entregar su número de clave de su tarjeta bancaria y los sujetos le sustraen la suma de $120.000, desde un cajero ubicado en un
servicentro en la ciudad de La Serena. Posteriormente fue abandonado en la vía pública y colocó la respectiva denuncia”.
Se realizó un trabajo de georreferencia en los lugares donde estuvo la víctima y se logró ubicar el automóvil, además de la detención de dos personas de sexo masculino, que fueron trasladados a la unidad policial.
Los detectives continúan con las indagaciones para dar con el paradero de la mujer y el otro individuo que participó en los hechos.
Para el Jefe Regional de la PDI, Prefecto Inspector Richard Gajardo, “estamos contentos con contar con unidades especializadas y personal altamente calificado para llegar a este tipo de resultados. La señal más potente para nosotros como institución es decirle a la comunidad que pueden contar con nosotros, que necesitamos que ellos se sientan con la confianza de poder denunciar este tipo de hechos. Nosotros somos una policía que no informamos intensiones si no que comunicamos resultados”.
Los dos detenidos de sexo masculino, mayores de edad, identificados como José Echaniz Cortez de 23 años de edad y Robinson Montenegro Campos, por orden del Fiscal de Turno, fueron puestos a disposición del Juzgado de Garantía de la ciudad de La Serena.
En tanto la PDI, junto al Laboratorio de Criminalística Regional, continúan realizando diligencias en el vehículo particular de la víctima para poder levantar todo tipo de evidencias que permita acreditar aún más los hechos denunciados.
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