Los estudiantes de la Universidad de La Serena llevan más de una semana movilizados, en apoyo al movimiento feminista y demostrando su rechazo a los actos de acoso y abuso dentro de la institución.
Desde la casa de estudios superiores señalaron a través de un comunicado que ellos deben respetar la movilización adoptada por los estudiantes, “en el sentido de no realizar actividades docentes”, como clases, trabajos, etc.
Indicaron que hasta el miércoles 23 de mayo, “no se ha recibido de manera oficial ningún tipo de petitorio emanado de estudiantes“, por lo tanto no se han podido reunir para trabajar en otorgar respuestas a las demandas de los estudiantes.
Si bien, hay un petitorio circulando por las redes sociales, este se debe entregar de forma oficial y por las vías formales para establecer una mesa de trabajo.
Respecto a las denuncias por acoso, maltrato y discriminación arbitraria han estado siendo canalizadas.
Dentro del mismo comunicado señalan que en el mes de enero, “el Consejo Académico entregó la venia a un protocolo base, el que posteriormente a petición de la Federación de Estudiantes (FEULS), debía mejorarse desde el punto de vista de los estudiantes”.
Luego de una serie de reuniones se dio por finalizado el análisis de este, “sin embargo, a petición de la FEULS, dicho protocolo fue paralizado a seguir su curso de tramitación hasta que se cuente con una nueva versión”.
Y precisan que este protocolo no fue firmado por FEULS.
Finalmente agregan que “el acoso en cualquiera de sus formas, en especial en el tema de la violencia y acoso en contra de las mujeres que ha inspirado esta movilización, cuenta con el más profundo rechazo de nuestra Universidad, la que pone a disposición de la comunidad universitaria todos los mecanismos legales existentes que permitan sancionar estas malas prácticas”.
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