A una familia de Andacollo y otra de Coquimbo se les hizo entrega de una pensión de gracia, debido a que por problemas de salud no pueden trabajar.
Esta es una ayuda que se tramita a través de la Intendencia de Coquimbo, para personas que han prestado servicios distinguidos a la comunidad, se han visto afectados por accidentes o catástrofes, o bien presentan dificultades para ejercer labores remuneradas que les permitan mantener a sus familias.
En este sentido, la Intendenta Lucía Pinto sostuvo que “las familias son lo más importante y vamos a brindarle todo el apoyo que necesiten si necesitan emprender, o atender cualquier necesidad. Este no es un mero apoyo económico, es un reconocimiento también a su sacrificada labor”.
La situación socioeconómica de María Gálvez, vecina de la comuna de Andacollo, es compleja. Ya que debido a problemas de salud no podrá continuar trabajando y apenas recibe una pensión de orfandad de 32 mil pesos que le heredó su padre.
“Es una ayuda muy grande. Vivo de allegada y a esta altura de mi vida, ya no puedo trabajar. Le doy gracias a la Intendenta, porque me concede una alegría porque no podría seguir adelante sólo con la pensión de mi padre”, indicó la beneficiada tras recibir su pensión vitalicia.
Pensión de gracia que también recibió Susana Orrego, vecina de la comuna de Coquimbo. Beneficio que le permitirá apoyar los cuidados de salud su hija Sofía Olivares de 12 años que padece de glucogénesis hepática tipo 3, miopatía metabólica y convulsiones.
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