La estadounidense Serena Williams (181 A), inscribió su nombre a la décima final en Wimblendon en su carrera al derrotar a la alemana Julia Goerges (13A) quien llegó a su primera semifinal de un Grand Slam con el mejor saque. Williams tan solo necesito 69 minutos y para ganar con doble 6-2 y 6-2.
La norteamericana, repetirá la final de 2016 al enfrentar a la también germana Angelique Kerber (10A) al vencer a letona Jelena Ostapenko (12), con doble 6-3 y 6-3.
Serena, retorna a la final de Wimbledon tras perderse el torneo de 2017 por estar embarazada, y disputar la última a principios del pasado año en el Abierto de Australia, cuando estaba de dos meses su hija Olympia, nacida luego en septiembre.
La nacida en Michigan, de ganar este sábado el octavo título en el All England Club, la estadounidense rebasará a la alemana Steffi Graf, que ha levantado siete veces el “Venus Rosewater Dish”, como se conoce el trofeo que premia a las ganadoras en Wimbledon.
También logrará igualar a la australiana Margaret Court con 24 títulos del Grand Slam en su carrera.
Además, Serena recuperará posiciones y del 181 en el que comenzó el torneo se moverá ahora al puesto 28 del mundo, y si el sábado gana el título contra la germana Angelique Kerber, subirá hasta el 19.
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