Ubicada en Combarbalá, la planta minera La Barba forma parte del programa “Transferencia de Capital Minero” que financió el Gobierno Regional, y que tiene como objetivo beneficiar a los pequeños mineros de zonas rezagadas de nuestra región, a quienes se les entregan recursos a través del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), para que puedan adquirir máquinas, capacitación o implementación minera, lo que les ayudará a aumentar su producción y mejorar su calidad de vida.
En este sentido, en “La Barba” se implementó esta planta de procesamiento de mineral, a cargo de la Asociación de Mineros de Combarbalá y cuyo poder de compra se realiza por intermedio de ENAMI, donde se instaló una torre de muestras por un monto que supera los $192 millones, aprobados por el Consejo Regional (CORE).
Por esta razón, los consejeros regionales, en su política de trabajo en terreno, se trasladaron hasta esta planta minera junto a representantes de la Seremi de Minería, para fiscalizar su funcionamiento y escuchar las principales demandas de los pequeños mineros que trabajan ahí.
“Hemos estado en Andacollo, Punitaqui, en Illapel y hoy estamos en Combarbalá con los pequeños mineros, a quienes queremos que les vaya bien, por eso siempre hemos estado colaborando desde la aprobación de los proyectos, desde la asignación de los recursos y lo que hemos estado haciendo es ver si esos recursos han generado el impacto que esperamos y en este sentido el llamado también es al gobierno, para que cuando nos presenten los proyectos para ir en ayuda o mejora de los procesos productivos de los mineros lo haga también reconociendo las necesidades territoriales que hay”, indicó el consejero Cristián Carriel, presidente de la comisión de Minería del CORE.
Con el proyecto Mineros de Ley III del Gobierno Regional, se ha apoyado la actividad minera en zonas rezagadas como Combarbalá, Canela, Punitaqui, Monte Patria y Andacollo, con una inversión que supera los $1.600 millones aprobados por el CORE.
Los dirigentes mineros concuerdan que la existencia de la planta es un gran avance para la minería local, no obstante, existen otras necesidades que ayudarían a que el proceso de análisis del mineral y posterior pago por parte de ENAMI se reduzcan considerablemente en tiempo, ya que hoy en día estos procesos se hacen en las plantas de Illapel u Ovalle.
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