A las palabras que emitió el Consejo Académico en una declaración pública con respecto a la toma de campus y el ultimátum que entregaron para que los estudiantes abandonen su postura, ahora se suman los académicos e investigadores de la casa de estudios para que se devuelvan los lugares tomados.
En una nueva declaración, los académicos señalan : “Como es de conocimiento público, una vez más las actividades normales en la Universidad de La Serena han sido afectadas como resultado de la acción de grupos de personas sin representatividad federada. Estas personas encapuchadas y sin identificar, armados de palos, fierros y piedras, y sin mediar intención de diálogo, emprendieron acciones violentas contra estudiantes, profesores, personal y autoridades universitarias, impidiéndoles el acceso a distintos ámbitos de la Universidad, donde realizan sus estudios, investigaciones y tareas cotidianas que hacen que esta Universidad tenga una razón de ser.”
Los académicos e investigadores mencionan enérgicamente el rechazo hacia las acciones violentistas denominándola “usurpación” y en su declaración señalan: “Los académicos e investigadores que firman esta declaración manifiestan su más absoluto rechazo a esta usurpación violenta e ilegítima, que coarta derechos fundamentales del conjunto de la Comunidad Universitaria.”
Según los especialistas, estas actividades violentas coartan las escasas posibilidades de investigar, con los escasos recursos que hay para ello: “Con el denodado y sacrificado esfuerzo de los académicos e investigadores, y a pesar de las dificultades financieras, la Universidad de La Serena ha mostrado un progreso sostenido en cuanto a la adjudicación de proyectos de investigación y desarrollo.”
Califican la toma de “usurpación”
A ello, suman en su declaración: “La usurpación de nuestras instalaciones destruye los logros de años de trabajo tesonero, dañando nuestra imagen de agentes confiables para llevar adelante investigaciones científicas relevantes. No poder acceder a nuestros laboratorios, gabinetes u oficinas impide el cumplimiento de los objetivos de los proyectos en ejecución y por consiguiente amenaza la credibilidad frente a las agencias externas que apoyan nuestras investigaciones”
Los firmantes se refieren al ambiente generado en la casa de estudios al respecto señalan: ” Todavía podemos salvar a la Universidad de La Serena de una espiral que apunta a la barbarie. Los abajo firmantes rechazamos enfáticamente la toma de la Universidad por parte de un grupo minoritario de personas. Instamos a que dichas personas depongan su actitud violenta y coercitiva, solicitando que se plieguen al diálogo con el resto de la Comunidad, como debe ser el derecho en una Universidad democrática”
Por último, hacen un fuerte llamado a las autoridades respectivas a intervenir y actuar: ” que las autoridades y cuerpos colegiados de la institución realicen las gestiones necesarias para deponer la toma e invitar a estas personas a contribuir a la conformación de la representatividad de sus pares para integrarse a las instancias de diálogo. Esperamos que en las personas que deciden esta toma violenta reine la cordura y sepan ver que su acción unilateral de usurpación tiene consecuencias. Su persistencia en la acción justificará que las autoridades de la Universidad hagan uso de sus atribuciones legales para garantizar el desarrollo de los derechos de la Comunidad Universitaria en el ámbito que le corresponde.” finalizan.
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