Los resultados de una encuesta que se llevó a cabo para conocer el impacto de la pandemia del COVID-19 en los pobladores de la región de Coquimbo, mostraron que el nivel socioeconómico o incluso el género influyen directamente en cómo se vive la crisis sanitaria, una realidad que también cambia de acuerdo a factores sociales, económicos o personales.
En este sentido, las personas de escasos recursos y las mujeres serían los grupos más expuestos, de acuerdo al sondeo realizado por el Instituto de Políticas Públicas (IPP) y la Escuela de Ciencias Empresariales (ECIEM) de la Universidad Católica del Norte (UCN) sede Coquimbo, el cual se basó en opiniones ciudadanas y abordó seis grandes aspectos: la forma de enfrentar la pandemia; la administración de los recursos; la convivencia en el hogar; el teletrabajo; los cambios sociales y las expectativas de futuro.
Daniela Henríquez, directora alterna del IPP, destacó que una de las conclusiones más relevantes de la encuesta es que no todas las personas viven la pandemia de la misma manera, pues quedan en evidencia fuertes diferencias entre niveles socioeconómicos, y las personas de bajos recursos son las que se encuentran más vulnerables.
Por ejemplo, un 84% de los encuestados considera que la pandemia afecta gravemente su calidad de vida y un 70% cree que afecta su salud mental o emocional. Sin embargo, dentro del grupo de personas con ingresos de hasta $464.000, un 78% indica que le ha afectado mental y emocionalmente, mientras que en el grupo de ingresos más altos, de $1.390.000 y más, esta respuesta es para el 63%.
“Las personas de bajo nivel socioeconómico están limitadas para implementar el teletrabajo por ejemplo, muchos están viendo una reducción de sus ingresos y su a vez tienen mayores gastos de acuerdo a lo que nosotros pudimos observar”, precisó.
Henríquez también habló sobre la situación de las mujeres de acuerdo al sondeo. “Ellas se están haciendo cargo de la mayoría de las tareas en el hogar (92% de las mujeres frente a un 8% de los hombres), también del apoyo escolar de los niños (86%), y eso tiene un impacto en la salud mental”, apuntó.
Los resultados de la encuesta fueron presentados en un seminario online a principios de agosto que fue transmitido a través de Facebook, mientras que el documento con los detalles quedó a disposición de la ciudadanía en el sitio web del IPP.
La idea, recalcó Daniela Henríquez, es que este insumo sirva para la toma de decisiones o la generación de políticas públicas con foco en los grupos más expuestos.
La socióloga también aprovechó de extender la invitación para el próximo diálogo virtual organizado por el IPP sobre las Vivencias en Pandemia, que será el viernes 28 de agosto a las 17:00 horas vía Zoom, con el objetivo de levantar información sobre cómo las personas están viviendo la emergencia, pero desde un enfoque cualitativo.
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