La situación hídrica en la Región de Coquimbo preocupa a la comunidad. En el caso de La Serena y Coquimbo, la empresa sanitaria señaló que el embalse Puclaro se encuentra en un 28% de su capacidad total y de no llover podría llegar a su nivel mínimo en noviembre de este año, teniendo un riesgo de un posible racionamiento de agua.
En el caso de la comuna puerto, el Concejo Municipal aprobó por unanimidad la autorización para adquirir materiales, como tierra de hoja, conchuela, gravilla, corteza de pino, entre otras, y vegetación como algarrobos, lagunarias, taras, puyas, gauras, rhus y maicillos, para el mejoramiento de áreas verdes por un monto de $29.990.990 pesos, lo que busca dar un giro a la política de riego en Coquimbo.
Pero en La Serena la situación es distinta. En conversación con la concejala Daniela Norambuena señaló que no se ha tomado ninguna medida para paliar la escasez hídrica. “Nosotros no tenemos ningún plan concreto, estamos a la deriva (…) ninguna acción, yo estoy sorprendida, desencantada, hay muchas cosas que yo he propuesto y como aquí uno es minoría y ven la tendencia política”.
Según ella, hace 4 meses que presentó una serie de iniciativas pero señaló que “no hay disposición del municipio para tomar medidas al respecto ni voluntad de generar una campaña en culturizar a la gente”.
“Yo presenté para generar una ordenanza municipal de implementar el racionamiento de agua en función del riego en horario peak, porque todos debiéramos regar antes de las 9 o después de 19 hrs para evitar evaporación y la respuesta fue no se preocupe lo vamos a ver (…) lo otro que se puede hacer es un trabajo de reemplazo de las nuevas obras que se pueden hacer”, es decir buscar plantas como suculentas o con menor consumo de agua, evitar pasto, etc.
Hoy la prioridad número uno es asegurar el consumo para la gente pero nosotros tenemos que hacer acciones que para cuando nos digan que habrá racionamiento de agua se diga que nosotros como municipio hemos hecho algo” manifestó Norambuena.
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