Así debe ser una buena máscara de soldar

Fusionar una o más piezas de metal para construir un objeto nuevo es un oficio interesante. Requiere una habilidad única, además de ser conscientes de los cuidados básicos que hay que tener. Usar una máscara de soldar, por ejemplo, sería uno de ellos.
Al modelar una pieza haciendo uso de calor es inevitable que salten chispas descontroladamente en cualquier dirección. Y la máscara de soldar está hecha de manera que el rostro y el cuello queden totalmente cubiertos mientras se manipula el metal.

Como toda herramienta utilitaria usada en oficios de riesgo, máscara de soldar debe cumplir unas características específicas que garanticen una labor segura. Además, forma parte de un kit esencial para trabajar soldaduras.

Cuál es la mejor
En el mercado se consiguen una amplia variedad de máscaras fabricadas con materiales de calidad y muy importante: super resistentes al calor.
Al preguntarnos cuál es la mejor la respuesta definitiva es la que te hace sentir cómodo y esté dentro del presupuesto, por supuesto.

Sin embargo, hay una serie de aspectos en su estructura, los cuales es necesario conocer antes de elegir. ¡A tomar nota!
● Facilitar el acople con las mascarillas faciales, las cuales se encargan de filtrar el humo generado por la soldadura, así como ajustarse sin dificultad a la cabeza.
● Definitivamente tienen que ser regulables. No muy justa, pero tampoco holgada, esa es la premisa para saber cuál es la medida perfecta.
● El visor debe estar hecho preferiblemente de cristales inactínicos, reforzado con relieves en los bordes. Este material evita el cansancio en los ojos.
● Te permiten regular el grado de oscurecimiento del visor en función al método de soldadura que se va a trabajar.
● Preferiblemente que estén hechos con fibra vulcanizada o polipropileno.

Tipos de máscaras de soldar

Según el diseño vas a encontrar, principalmente, tres estilos de máscaras de soldar diferentes. Conócelas.

Como toda herramienta utilitaria usada en oficios de riesgo, la máscara de soldar debe cumplir unas características específicas que garanticen una labor segura. Además, forma parte de un kit esencial para trabajar soldaduras.

De mano
Tal como sugiere su nombre está hecha para sostenerse con una mano, quedando una libre con la que soldar. A decir verdad, no es la más práctica de todas, a menos que seas todo un experto.
También es necesario aclarar que este estilo está pensado para trabajos pequeños y rápidos. Su ventaja es que suelen ser económicas.

¿Cómo son? Normalmente están fabricadas de diversos materiales e incluyen una empuñadura con la que puedes agarrarlas cómodamente.

De cabeza
A diferencia de la anterior, con esta las manos quedan completamente libres, lo qué se traduce en mayor control para manipular las herramientas.
Esto te lleva a:
● Trabajo más limpio.
● Mejores terminaciones.
● Mayor seguridad.
Son de las más prácticas con las que puedes trabajar, de ahí que sea una de las más elegidas. Las reconocerás fácilmente por su diseño, el cual se asemeja a los usados por los motociclistas.

Solo que este cubre el rostro completamente y el visor abarca únicamente el contorno de los ojos.

Fotosensibles
La evolución de las máscaras para soldar incluye tecnología que facilita su uso. El visor trae un sensor que detecta los rayos emitidos durante la soldadura que ajusta automáticamente el grado de oscuridad de este.
Es por ello que también la encontrarás en diseño electrónico. Muy recomendado para quienes se inician en el oficio.
Su punto débil es que funcionan con baterías. Importante tener en cuenta cuando se trabajan jornadas largas.

Consejos finales
Ahora tienes claro cuáles son las características principales de una máscara de soldadura, los tipos existentes según el diseño y para qué momento o estilo de trabajo se recomienda usar.

Sumado a ello, queremos brindarte unos últimos consejos finales que te ayudarán a elegir mejor tu herramienta de trabajo.
1. Debe ser ligera, ya que la debes usar un tiempo prolongado.
2. Elegir en función al trabajo que se va a realizar. Fijarse siempre en el grado de protección que brinda.
3. Ser flexibles con el presupuesto, en otras palabras no escatimar, ya que se trata de una herramienta que usarás constantemente.
La máscara de soldar que elijas te acompañará por mucho tiempo, selecciónala con cuidado.