Locatarios del balneario de Tongoy preocupados por la violenta pelea que se produjo entre cuidadoras de vehículos

De un grave hecho de violencia fueron testigos comensales, locatarios y visitantes que se encontraban en el sector de los restoranes de la playa grande de Tongoy, este domingo 6 de noviembre a las 11.00 AM a plena luz del día, en un horario de alta concurrencia en el lugar, dos mujeres cuidadoras de autos informales se trenzaron en una pelea en la vía pública en medio de la calle, con golpes de puños para luego pasar a agredirse con palos, resultando lesionada en su cabeza una de las mujeres que quedó sangrando y desmayada en el suelo, mientras desde los restoranes trataban de llamar a Carabineros y muchos clientes se retiraban en vista de la situación.

Los comerciantes del sector, dedicados en su mayoría al rubro gastronómico, se encuentran desesperados ya que según señalan este tipo de situaciones de riñas y acoso a los visitantes por parte de personas en estado de ebriedad se reitera desde hace bastante tiempo, causando una sensación de seguridad constante.

Claudio, locatario del restorán Costa Tongoy “esta situación se viene reiterando hace mucho tiempo y esta fue la gota que rebalsó el vaso, a nosotros nos está afectando directamente ya que por culpa de esta pelea se nos fueron clientes y nos reclaman que esta personas que están ebrias o drogadas insultan a nuestros clientes y a nuestro personal”.

“Estuvimos llamando durante toda la pelea a Carabineros y al final tuvimos que ir a la comisaria porque no contestaron nunca el teléfono, nos dijeron que tenían malo el teléfono que funcionaba con internet y estaba cortado, si hubiese sido una emergencia peor algo más grave. Hablamos con la delegación municipal y nos dijeron que no pueden hacer nada, que lamentablemente no está en sus facultades, incluso el dueño del restorán tuvo una reunión con ellos y le dijeron que daban desde Coquimbo directo los permisos para cuidadores de autos”, señaló uno de los locatarios.

Ante la problemática que está aconteciendo señaló que “aquí en el estacionamiento llegan muchos autos y lo primero que lo recibe una persona curada y drogada que prácticamente se le mete adentro del vidrio y le exigen altiro la plata, entonces al final la gente se termina yendo, obviamente por el miedo a que le hagan algo, pueden reaccionar mal, le pueden rayar el auto. Nosotros estamos pidiendo más seguridad porque vivimos del turismo, estamos abiertos todo el año”.