No importó donde, había que celebrar, y es que los argentinos sentían que su selección tenía una deuda pendiente que hoy quedó saldada.
Por tercera vez, la albiceleste alzó la copa del mundo y a miles de kilómetros, los argentinos residentes y los que por estos días visitan la zona, hicieron suyo el El Faro Monumental de La Serena para desbordar su alegría.
Cual obelisco, el icónico monumento serenense se tiñó de albiceleste. Un centenar de trasandinos cantaron y festejaron la “copa de Lionel”
“No te puedo explicar como estoy” afirmó Daniel Martínez, trasandino avecindado en La Serena que llegó a El Faro para festejar, “es una alegría hermosa, yo ya soy campeón del mundo el ´86, pero mis hijos no lo eran, entonces es una alegría hermosa… por toda esta gente… es increíble, no se puede pedir más nada”
Solo alegría y festejo, que se extendió durante la tarde del sábado en La Serena.
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