La variedades de deportes que existen en la actualidad que logran beneficiar al cuerpo y la mente son amplios, pero hay uno que con solo un elemento que abre la puerta al bienestar: el tenis de mesa. Para jugarlo, solo se necesita una paleta de ping pong.
Este elemento posee la simpleza de ser pequeño, de fácil traslado y que permite la práctica del deporte después del trabajo o la universidad. Las paletas de ping pong tienen la particularidad de tener superficies de goma de diferentes colores y funciones.
De un lado será de color rojo, que permite dar golpes secos y rectos, por el otro una superficie negra con rugosidad, que sirve para dar envíos con cierta parábola una vez que son efectuados, además de contar un una empuñadura de madera que no llega a ocupar el ancho de la mano.
Además de las mencionadas paletas, solo se necesita una mesa reglamentaria que se realiza en un material llamado MDF o melamina y una pelota que habitualmente es de celuloide, de color naranja o blanca.
Al igual que su familiar más directo, el tenis sobre césped, se puede jugar de manera individual o en parejas, siendo un deporte ágil y competitivo.
Beneficios de jugar con la paleta de ping pong
El tenis de mesa es un deporte sin estrés exhaustivo para el cuerpo. Los golpes que se dan con la paleta de ping pong no afectan al cuerpo, y permite al jugador desarrollar algunas aptitudes importantes para las personas.
Avanzar en la agilidad mental, reflejos, coordinación son algunos de los beneficios que genera jugar al tenis de mesa, además de evitar lesiones complejas por su leve impacto en la totalidad del cuerpo.
También, como la mayoría de los deportes, permite a los más pequeños comenzar a relacionarse con sus pares, en un ámbito de aprendizaje, además de desarrollarse física y mentalmente. Todo con la simple actividad de empuñar una paleta de ping pong.
¿Qué puedes hacer con la paleta de ping pong?
Al igual que en el tenis sobre césped, la paleta además de ser un elemento básico para el juego, tiene la particularidad de permitir según la orientación que se le de, asestar diferentes golpes que generan diversos cambios de dirección.
Al golpear de costado, como intentando cortar el aire, la paleta hará que la pelota de un giro sobre su mismo eje, generando un efecto a lo que se denomina spin, similar a lo que sucede en el tenis convencional.
Pero también las paletas de ping pong permiten dar un golpe típico del tenis de mesa. Es una especie de empuje, de revés o de derecha, que logrará que la pelota al estar cerca de la red, pase con facilidad al espacio del rival.
Nacimiento del tenis de mesa
El tenis de mesa nació en 1870, en Inglaterra, como una variante del tenis sobre césped y pronto logró en las universidades ser practicado por una amplia mayoría de personas para empezar a popularizarse en todo el territorio.
En 1902 aparecieron las primeras paletas de ping pong recubiertas con la clásica goma que llevan en cada uno de sus lados, simplificando el juego y dándole más atractivo debido a las diferentes variedades de golpes que se lograron efectuar con este adelanto.
Pero el salto a la fama de la paleta de ping pong se dio en el año 1988, cuando apareció por primera vez en los Juegos Olímpicos de Seúl, donde China se alzó con la medalla dorada, y así pudo dominar la práctica de este deporte hasta estos días.
Entre las opciones de deporte bajo techo, la paleta de ping pong y el tenis de mesa configuran una gran alternativa para cuidar el cuerpo y la mente, además de generar un ámbito de buena compañía, fortaleciendo el vínculo de las personas.
Fuente:Pexels
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