Una situación incómoda es la que tuvo lugar ya en pleno desarrollo de la Cuenta Pública de la gestión 2023 del alcalde de Coquimbo, Alí Manouchehri y de la que fue testigo el equipo de Mi Radio.
Esto, porque el concejal Guido Hernández llegó con un retraso de cerca 20 minutos a la actividad que se desarrolló en el edificio consistorial de la Municipalidad de Coquimbo.
Cabe destacar que el concejal, visiblemente alterado, solicitó ingresar con un grupo de dirigentas sociales, pese a que para poder acceder a la Cuenta Pública sólo podía hacerse con invitación en mano y ellas aparentemente no contaban con ese documento.
Hernández tuvo un visible altercado con funcionarios de seguridad, señalando que el evento “no corría peligro” si es que ingresaban cuatro personas a una actividad que el concejal insistió “era público” y que se estaba cometiendo una arbitrariedad.
Instantes después, se hizo presente el actual administrador municipal y ex jefe del Departamento de Seguridad de la Municipalidad de Coquimbo, David Díaz, quien trató de calmar al concejal y explicarle que el protocolo para esta instancia incluía una invitación previa, además de un aforo límite.
Tras la insólita discusión, Guido Hernández aseguró que no haría ingreso a la Cuenta Pública si no lo hacía junto a las vecinas, por lo que en definitiva David Díaz lo instó a retirarse bajo esas condiciones.
Lo curioso es que sólo instantes después, todas las personas tenían invitación en sus manos y pudieron ingresar normalmente. Según testigos de la bochornosa situación “sólo se trató de un berrinche del concejal para llamar la atención”, ya que él, pese a estar bastante alterado, de todas maneras se integró a la testera donde se estaba desarrollando la Cuenta Pública Municipal.
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