La Escuela José Bernardo Suárez, ubicada en la tranquila localidad atravesada por la ruta D51 que dirige hasta Andacollo, enfrenta una crisis que afecta a toda su comunidad escolar. Los pasillos, usualmente llenos de vida y risas infantiles, ahora se encuentran vacíos. No hay clases ni asistencia de alumnos debido a una promesa incumplida del Servicio Local Puerto Cordillera.
Carolina Osorio, residente de Maitencillo y apoderada de la escuela, comparte su preocupación: “Decidimos como apoderados que nuestros niños no vengan a clase hasta que Puerto Cordillera nos entregue la locomoción. Muchos de nosotros estamos sin trabajo y el costo del combustible es excesivo, con cuatro vueltas al día para traer y llevar a los niños. La situación económica se ha vuelto insostenible”.
El impacto de la falta de transporte escolar se extiende más allá de Maitencillo. La comunidad educativa de Manzano también se ve afectada, y la escuela recibe niños de zonas aún más lejanas como Quebrada de Martínez, La Cortadera y La Percala. La urgencia de obtener un servicio de locomoción es clara, ya que no solo afecta la educación, sino también la salud de los menores, quienes están enfermando debido al estrés y las dificultades logísticas.
Los padres relatan con frustración cómo el Servicio Local Puerto Cordillera ha pospuesto repetidamente la entrega del servicio prometido. “En marzo nos dijeron que la licitación no se había concretado, luego que en abril estaría listo, después que para mayo, y ahora dicen que probablemente sea en junio, pero no hay nada certero”, lamenta Osorio.
Además, los buses que circulan por la zona cobran altas tarifas a los estudiantes de educación básica. “Están pagando mil pesos cada uno y si viene con el apoderado, este tiene que pagar dos mil pesos más el niño chico, sumando tres mil. Hablamos de seis mil pesos diarios, y si tiene dos niños, ya son siete mil. El gasto es insostenible”, detalla Osorio.
En un acto de protesta y buscando ejercer presión, los apoderados han dejado de enviar a sus hijos a la escuela y han instalado un letrero en las afueras del recinto. “Si hay que recuperar clases después, se hará, pero por mientras, la única forma de presionar es esta”, concluyen.
Ante estos hechos y la falta de respuestas del Slep Puerto Cordillera, los apoderados y comunidad no descartan movilizaciones y corte de la ruta D51 para manifestar la dramática situación que se vive con la educación rural.
Respuesta de SLEP Puerto Cordillera
Por medio de un comunicado el servicio local de educación pública señaló que “el SLEP Puerto Cordillera está en proceso de Licitación Pública de 16 líneas de transporte equivalentes a $1.680 millones para los próximos tres años, asegurando el 2024, 2025 y 2026 un transporte integral para niños, niñas y jóvenes de nuestros establecimientos educacionales de las comunas Andacollo y Coquimbo, encontrándose en su última etapa de adjudicación según indicaciones de la Contraloría General de la República.
“Ante la situación manifestada por los padres, madres y apoderados de la Escuela José Bernardo Suárez, representantes del Servicio Local y la comunidad educativa sostuvieron una reunión en la que se presentó una solución para el traslado de los estudiantes y de esta forma dar continuidad al servicio educativo”, señala el comunicado.
“Junto con bridar a nuestras comunidades educativas este importante beneficio del transporte escolar, el SLEP Puerto Cordillera reafirma su compromiso de seguir juntos y juntas construyendo educación pública de calidad en las comunas Andacollo y Coquimbo” finaliza.
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