Un positivo balance es el que entregaron las autoridades de la Pampilla de Coquimbo en su nueva versión, que esta vez contó con dos escenarios, el monumental donde se presentaron grandes artistas y el de la Pérgola, una parte que el municipio porteño buscaba potenciar y que también dejó sorpresas.
Sin embargo, esto también dejó críticas, debido al costo que tuvo el show en el último escenario mencionado. De acuerdo a la página de transparencia hay 6 ordenes de compra, 2 por licitación para la habilitación y el montaje por $28.999.110 y otra por la producción de conjuntos de música folclórica por $6.999.999. Mientras que otras 4 son por trato directo: contratación de El Flaco, Paul Vásquez, por $5.950.000; Stefan Kramer por $16.065.000; Inti Illimani por $15.500.000; y Erick Berríos por $8.092.000.
Esto deja un gasto de $81.606.109, desconociendo qué ocurre con los shows de Karen Paola y los Power Peralta y cómo fue la contratación de estos, hasta el momento.
El concejal Guido Hernández señaló que “lo del segundo escenario, una innovación que no sé si fue del todo necesaria considerando que lo que se esperaba era poder utilizar este espacio para la música chilena y nuestras tradiciones y se fue un poco desvirtuando esta situación, generando que como cerraron muy temprano este espacio, se colapsó el sector de las calles comerciales y las calles de las cocinerías, provocando una serie de inconvenientes a los locatarios que invirtieron en poder contar con un espacio para trabajar en la Pampilla de Coquimbo”.
Por su parte, el concejal Mario Burlé agregó que “hay que tener presente que esto ha sido tradicional, que el escenario donde se presentan los artistas internacionales y la pérgola donde se presentan los conjuntos folclóricos y este año se quiso dignificar teniendo un escenario de mejor calidad y esto fue aprobado por la unanimidad de los concejales”.
El Alcalde de Coquimbo, Alí Manouchehri, defendió el gasto hecho por el municipio para sostener un segundo escenario en la Pampilla, en este caso el de la pérgola “consideramos que la Pampilla es la fiesta más grande de Chile y es dificil bajarle el estandar”.
El edil porteño afirmó que “yo creo que si uno saca los números de la cantidad de eventos que nosotros realizamos durante el año, yo creo que es extremandamente menor la inversión que nosotros hacemos en la pérgola para porder darle la vida o la fuerza que hay”
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