Un centenar de personas que remataron puestos en la Pampilla 2024 llegaron hasta el municipio coquimbano para solicitar que se reintegren los dineros cancelados por concepto de arriendo y permisos para instalar sus puestos. Los locatarios acusan pérdidas debido a la gran cantidad de ilegales y a la poca fiscalización del municipio.
Una de las locatarias del sector botillerías afirmó que “en 11, 12 años que llevamos como comerciantes, jamás habíamos visto tanta inseguridad. El tema de los ambulantes nos perjudicó totalmente, ya que no podíamos competir con sus precios. Era una competencia totalmente, como le llaman, desleal. Pedimos reiteradas veces ayuda, fiscalización, y la cual ni siquiera nos dejaban hacer registro de la ayuda, de las peticiones que íbamos a hacer, de que nos sacaran a los ambulantes”.
La misma comerciante afirma que “no hubo fiscalización de Carabineros. Primera vez que no vemos que carabineros están fiscalizando. Tampoco pasaba, no sé, nosotros todos los años ellos pasan cerrando los locales a las 4 y media, 5 de la mañana. Nunca ocurrió eso, o sea, uno podía tener abierto las 24 horas si quería. Cuando fuimos al sector de adelante, a Comisión Pampilla, a pedir la ayuda con los ambulantes, pedíamos los registros de que nosotros íbamos y tampoco. Siempre se nos fue denegado, auto estacionado en la calle, ambulantes que nos afectaron totalmente todas nuestras ventas, y no es una cosa de elegir un sector o no, fue un tema de ambulantes” señaló la locataria.
Otro de los afectados explicó que es “primera vez que hago un negocio de comida junto a mi pareja, junto a mi familia. Mi local se llamó El Semáforo. Si bien teníamos gente durante todo el día a la hora de almuerzo, familia grande, numerosa, a la hora de once también, pero con la inversión que realizamos uno espera recibir más ingresos, más ingresos de gente, y esto a la una de la mañana ya no pasaba. ¿Por qué? Porque al frente teníamos discos, teníamos comerciantes ambulantes vendiendo alcohol muy barato. Entonces, ¿quién compite con eso? Yo, por seguridad propia, por seguridad de mi pareja, cerraba a la una de la mañana, por miedo”.
En su relato, este locatario afirmó que “vi como afuera de mi local apuñalaban a jóvenes, como les pegaban a jóvenes. La muralla de mi local se movía porque afuera se armaba una discoteca. Entonces, una discoteca en la calle que la gente de familia evitaba pasar por ahí porque los asaltaban, les quitaban sus pertenencias. Yo invertí más de ocho millones para estar ahí, entre permisos, mercadería, ocho millones de pesos, y esa plata ni siquiera me entró cuatro de vuelta. Yo lo tomo para el chiste, pero ganó más la garzona que yo. Fiscalizaciones no hubieron de ningún tipo. Yo el último día me aburrí y fui a buscar a Carabineros. Mientras que la discoteca de afuera eran las diez de la mañana del último día y seguían metiendo a los jóvenes afuera”
El tema fue parte de lo analizado en el Concejo Municipal de Coquimbo. El concejal Guido Hernández fue uno de los colegiados que planteó el tema. “Yo sé que muchos colegas también se han entrevistado con locatarios que pagaron el remate y fueron parte de la pampilla 2024 y que han planteado que durante el desarrollo del evento hicieron distintos cuestionamientos y solicitaron apoyo a la administración o a la organización del evento respecto de situaciones que habían estado ocurriendo dentro del recinto particularmente que grupos organizados se habrían tomado parte del recinto, parte de los espacios del recinto, en muchos casos con fuerza, con armas de con arma blanca, amenazando a los locatarios, sin que el municipio haya actuado de forma concreta, sacando a estas personas del recinto, deteniendo a las personas que estaban ejerciendo esta violencia y afectando completamente el desarrollo normal del evento. Lamentablemente se utilizaron espacios de uso común, en los pasillos, se tomaron espacios que estaban otorgados a los locatarios y ellos plantean, estos contribuyentes afectados plantean que esto generó mermas en sus utilidades, que cuando fueron a hacer la solicitud de apoyo a la administración del evento no hubo ninguna forma de poder dejar un registro de este requerimiento a través de algún libro de reclamo y que también plantean que el municipio hizo vista gorda respecto de lo que estaba sucediendo”
En el mismo concejo municipal, el Alcalde Alí Manouchehri tomó la palabra para hacerse cargo del tema y afirmó que “yo difiero y tuve la oportunidad, les vuelvo a mencionar, de estar desde las seis y media de la mañana hasta las dos de la mañana. Caminé por toda la vampiria, estuve en los cerros, estuve en la cancha, conversé con la gente, recorrí la pérgola, recorrí el comercio, almorcé en los locales también establecidos y la verdad que la impresión es otra. Si eso fuera de esa manera, yo no podría caminar tranquilo por el recinto y caminé durante toda la fiesta escuchando a la gente y conversando con ellos y la verdad que la gente se fue bien contenta y es cosa de ver también lo que manifiestan a través de las redes sociales. Entonces es difícil poner un discurso sobre algo que tiene una valoración de la gente y yo no sé cuál es la estrategia de decir que la fiesta no resultó cuando la gente se fue contenta” señaló el edil.
El tema seguirá adelante, puesto que los locatarios que señalan estár afectados, insistirán en que el municipio devuelva los pagos, e incluso han señalado la posibilidad de tomar acciones legales de forma colectiva en contra del Municipio de Coquimbo si no tiene una respuesta positiva.
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