“Le suplicamos a quien lo tenga, nos entregue al perrito. No habrá ninguna consecuencia, no vamos a tomar acciones legales. Sólo queremos a Rocky de vuelta, por lo que significa para el tratamiento de la depresión de nuestra hija”, nos comentó con pena y angustia Natalia Castillo Pérez, dueña del perrito de asistencia emocional “Rocky”.
Van casi dos semanas desde la última vez que esta familia de Pan de Azúcar, sector Venus, supo de su mascota. Y lo que es peor, le perdieron la pista luego que ingresaran a robar a su casa el 25 de septiembre.
“Ese día mi hija tenía kinesióloga, nosotros salimos de aquí a las 3 de la tarde, esperaron que nos fuéramos y se metieron. Estábamos las dos solas y habíamos dejado a nuestro perrito “Rocky” dentro de la casa, porque no lo podíamos llevar a la consulta”.
Conversamos con Natalia y vivimos cara a cara su desesperada búsqueda: “Él es un perrito de asistencia psicológica y emocional. Mi hija vivió un proceso de bullying muy fuerte en el colegio hace dos años, por lo que nosotros la sacamos del colegio (…) Lo único que nos interesa es encontrar a nuestro perro, por el apoyo emocional, por lo que significa para nosotros y para el tratamiento de depresión que está viviendo mi hija”.
Natalia nos cuenta que tiene alguna información. Sus largos recorridos por Pan de azúcar y sectores aledaños, no ha parado. “Sabemos que fue una mujer que estaba parada al frente del almacén Don Lucho, en el callejón El Carmen. Nosotros ese día buscamos por todos lados, hemos pegado afiches de “Rocky” por todo el sector. No sabemos hacia dónde se lo llevó, si a Coquimbo, La Serena o Tierras Blancas”.
La familia está ofreciendo una recompensa e incluso nos pidió compartir el celular (+56 9 30733657) para que cualquier dato se los hagan llegar: “Como les decía, no vamos a tomar ningún tipo de acción. Es clave para Emilia, para su tratamiento psicológico, para el proceso que ella está viviendo de depresión. Y por eso estamos tan desesperados buscándolo”.
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