El Consejo Regional La Serena y el Colegio Médico de Chile expusieron en un comunicado que se encuentran enfrentando una crisis presupuestaria en la red pública de salud. Esta situación está afectando a los Hospitales de La Serena, Coquimbo y Ovalle, en donde las autoridades de los establecimientos han admitido que los recursos actuales no alcanzan para operar hasta fin de año.
Esta crisis está impactando fuertemente en la adquisición de insumos básicos para el funcionamiento normal de los distintos servicios clínicos, traduciéndose en postergación de procedimientos diagnósticos y terapéuticos que perjudica directamente a los pacientes.
Fernando Carvajal, Presidente Regional del Colegio Médico y nuevo Hospital de La Serena, señaló que “el Sistema Público de Salud tiene un problema crónico que está dado por su déficit histórico de financiamiento. Esta característica hace muy difícil poder optimizar su utilización, dado que se trabaja fundamentalmente en tratar de controlar la deuda histórica y no en avanzar en las atenciones que se requieren. En la medida que el perfil epidemiológico muestra una mayor frecuencia de enfermedades crónicas complejas, en donde su diagnóstico y tratamiento implica la participación de equipos técnicos más especializados y también de tecnología mucho más cara, la brecha existente ha aumentado. Esto dificulta enormemente la posibilidad de dar una respuesta a la necesidad de la población de manera adecuada y oportuna, especialmente en un escenario de restricción presupuestaria”.
El Consejo Regional La Serena y el Colegio Médico de Chile, mediante un comunicado, informaron que esta situación se explica por varias razones. “En primer lugar, existe un déficit histórico en el financiamiento, lo que obliga a gestionar la deuda en lugar de optimizar su funcionamiento. En segundo lugar, en la medida que el perfil epidemiológico ha cambiado hacia patologías crónicas complejas, en las cuales su diagnóstico y tratamiento requiere la participación de equipos técnicos más especializados y tecnologías más complejas y de alto costo. En tercer lugar, la pandemia trajo consigo la postergación y complejización de muchas patologías en una gran cantidad de pacientes. Finalmente, el contexto económico restrictivo que enfrenta el país ha reducido aún más los recursos disponibles para el sistema, lo que ha agravado la situación”.
En relación a la condición que se vive en los hospitales de la Región, explica que “esto se ha traducido en la dificultad de poder avanzar en la resolución de listas de espera y también en la atención de los pacientes ambulatorios hospitalizados por la carencia de insumos necesarios. Los hospitales están funcionando al límite de su posibilidad de operación y requieren obviamente una remesa que le permita superar esta situación para poder permitir a los equipos de salud que trabajen adecuadamente en la resolución de los problemas que la población presenta”.
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