La Corte Suprema dio luz verde al proyecto Puerto Cruz Grande, del Grupo CAP y que se emplazará en el sector de Punta Mostacilla, comuna de La Higuera. Esto es, unos cinco kilómetros al norte de Totoralillo y, por tanto, más cerca de la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt.
El fallo fue valorado por CAP. A través de un comunicado, la compañía indica que “Puerto Cruz Grande, de CAP Minería, que desde 2015 cuenta con su aprobación ambiental y planea una inversión inicial de unos US$250 millones, tiene el potencial de reconvertirse en un proyecto de puerto multipropósito de la Región de Coquimbo, ya sea de minerales o productos agrícolas nacionales o de países vecinos, como Argentina u otras naciones del cono sur de América”.
Cruz Grande se proyecta como un puerto donde los cargamentos que circulen por el Túnel Agua Negra, desde el Corredor Binacional, puedan embarcar y desembarcar hacia su destino.
Pese a seguir su curso, la cercanía con la reserva ha generado controversia en la comunidad de la región, grupos ambientalistas y otros a favor del desarrollo económico.
Situación similar al proyecto minero portuario Dominga, pero no igual, porque dado al nivel de expectación que generó y otros conflictos, aún no avanza.
La próxima semana se va a dar a conocer el fallo del Tribunal Ambiental de Antofagasta respecto a Dominga, que se ubicaría a 30 kilómetros de la Reserva Pingüino de Humboldt.
Mirada ambientalista
La Reserva Pingüino de Humboldt cuenta con la presencia de más de 21 mil ejemplares en las islas Chañaral y Choros, lo que representa el 80% de la población mundial de la especie.
Esta es una de las inquietudes de las agrupaciones ambientalistas, que explican que la circulación de embarcaciones podría contaminar la zona y dañar a los pingüinos.
Pero es Dominga la que se ha visto más atacada al respecto, aunque esté alrededor de 5 kilómetros más alejada de la reserva en comparación a Cruz Grande.
Parecidos pero no iguales
Ambos proyectos tienen elementos en común. La oferta de empleos para la comunidad, mejorar y apoyar la economía comunal y regional, la construcción de un puerto, entre otros.
En el caso de Dominga, la empresa Andes Iron promete que en construcción creará 10.000 puestos de trabajo directos y 1.450 en operación.
Contempla la producción anual de 12 millones de toneladas de concentrado de hierro y 150.000 toneladas de concentrado de cobre, como subproducto. La inversión es de US$2.500 millones y su vida útil es de 26,5 años.
En el caso de Cruz Grande, consiste en la construcción y operación de un puerto que atenderá barcos de hasta 300 mil toneladas. Consta de un sitio de atraque e instalaciones para la recepción, acopio y embarque de graneles minerales, con una superficie total de 35,27 hectáreas.
La inversión se estima en unos US$ 250 millones, con una vida útil mínima de 50 años.
Su objetivo primordial es permitir el embarque de 13,5 millones de toneladas de minerales a granel al año, prestando servicio a los yacimientos de minerales de hierro de la propia empresa y eventualmente a terceros.
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