Conoce la manera correcta de armar una huerta en casa

La cantidad de tiempo que las familias chilenas pasan en casa a propósito de la pandemia motivó a muchos a desarrollar acciones en el hogar que promueven la sustentabilidad. Por eso, la CRDP, Gore Coquimbo y Biblioteca Regional están divulgando una serie de talleres gratuitos para fomentar el reciclaje y otras acciones que avanzan en el respeto por el medioambiente.

El ciclo de talleres “recicla en casa”, que comenzó en octubre, considera varias charlas con temas sobre fabricación de compost, biopreparados y organización de residuos inorgánicos para llevar a un punto limpio. El último difundido fue sobre la “huerta en casa y extracción de semillas”, que relató la antropóloga sociocultural Carolina Álvarez.

Tener una plantación de este tipo puede disminuir hasta en un 30% el gasto en verduras y frutas, genera economías locales y disminuye el impacto sobre el ambiente, además de aportar a la salud, pues este tipo de productos orgánicos no posee fertilizantes y otros químicos nocivos.

Lo primero que explicó Álvarez es que al comenzar se debe considerar la existencia de tres aspectos: el lugar de la huerta debe considerar suficiente luz solar, acceso a agua y nutrientes suficientes para el crecimiento de los vegetales. “Idealmente la orientación de nuestras camas de cultivo debe ir de norte a sur para aprovechar la cantidad de luz de manera pareja”, comentó.

En el ámbito práctico, las herramientas necesarias son: pala, tridente para airear la tierra, huincha de medir, balde y sustrato. Estas serán las que permitirán crear y mantener el huerto, que a su vez se puede desarrollar mediante varias técnicas.

La más recomendada es la conocida como “doble excavación”, en que se delimita un área de 1,20 mts de ancho por un largo que puede ser de extensión libre. Se quitan los primeros 30 cm. de tierra de la superficie y se remueven los 30 cm de abajo con el tridente, agregando una gruesa capa de guano sobre ella. A la capa de arriba ya quitada se le agrega una nueva capa que puede ser compost o también la mezcla de 1 balde de tierra de hoja, 1/3 de saco de arena gruesa, ½ saco de guano, 1/4 humus de lombriz y ½ de tierra del lugar.

“Todos esos elementos se mezclan y agrega una pequeña cantidad de agua. Eso se cubre y posa bajo el sol unos 4 días para que el aumento de temperatura elimine microorganismos que puedan afectar el crecimiento de las plantas”, puntualizó la experta.

Para germinar las semillas, la antropóloga enseñó la manera de utilizar papel y cartón para fabricar almácigos en los que prenderán las plantas. Una vez crecidas y trasplantadas a la huerta se sugiere tapar con un plástico para generar mejores condiciones de temperatura y protección contra el viento y animales.

Finalmente, para recolectar las semillas que darán vida a una nueva huerta, la idea es “seleccionar las plantas más grandes y más fuertes, así nos aseguramos de la mejor transmisión genética”. Es necesario reconocer si estas se dan en flor o frutos y la sugerencia es esperar que la planta madure lo suficiente antes de acumular las semillas. Estas se pueden guardar hasta un año, porque pasado ese tiempo hay mayores dificultades de crecimiento.

El ciclo de talleres continua este miércoles 11 de noviembre con el tema “Enfermedades, plagas y biopreparados”, para culminar el 18 de este mes con la charla “Cómo organizar tus desechos inorgánicos para reciclar”. Ambas serán a través de plataformas digitales, a las cuales se puede acceder de manera gratuita escribiendo un correo a infogmistral@bibliotecaspublicas.gob.cl.